sábado, 4 de agosto de 2012

POSTDEMOCRACIA Y DICTADURA DE LOS MERCADOS.


  Hola, amig@s.

  En este artículo desearía analizar la situación actual que está atravesando nuestro país, España, y que yo califico de postdemocrática. Y me explico.

  Los último años, hemos visto cómo la situación socioeconómica se ha ido deteriorando aceleradamente, hasta el momento actual, en el que hemos fulminado toda la riqueza nacional en unos pocos meses.





   Es triste reconocerlo, pero todo el caudal de bienes manufacturados producto del esfuerzo de varias generaciones a lo largo de los últimos treinta años, se ha esfumado con las contrarreformas de los últimos meses.
   Miles de empresas que se crearon en la transición y con muchas dificultades consiguieron salir adelante y crear empleos y expandirse por el mundo exportando nuestra marca, han quebrado de forma masiva e imparable.

   Es lamentable escuchar cómo nuestros responsables políticos defendían con uñas y dientes no abaratar del despido, no acabar con los convenios colectivos, no subir impuestos, no elevar el IVA, no bajar el sueldo a los trabajadores, no precarizar más la situación de los más débiles... y un larguísimo etcétera. Nos deja estupefactos ver cómo todo lo que defendían ha sido lo contrario de lo que han llevado a cabo, con una actitud irresponsable y altanera, eso sí, añadiendo que son las "circunstancias", que va en contra de su ideología y que no querían hacerlo... pero que les han obligado.
Desde luego, si no querían hacerlo y les forzaban, bien podían haber dimitido y cambiado de profesión, por lo menos su actitud sería digna, pero no. El poder bien vale España, o mejor dicho, bien vale destruir España y a cuantos se lleven por delante. La ambición por el poder es superior a la ética o a los principios... pero la historia les juzgará, y no será más generosa de lo que ha sido con Adolf Hitler o Pinochet.





  La cuestión es: si es evidente que padecemos un gobierno radical, cuyas medidas son de extrema derecha en lo político y ultraliberales en lo económico, ¿a qué obedece? ¿Por qué mienten PERMANENTEMENTE?

 Hace unos meses, nuestro ministro económico, el mismo que hace unos años se responsabilizaba de Letham Brothers en Europa y la hundió provocando una crisis sin precedentes en los mercados, dijo algo aterrador sobre nuestro país: que España debía reducir el presupuesto en educación y sanidad, en más de diez mil millones de euros. O lo que es lo mismo, debían desmantelar, poner fin, al modelo educativo y sanitario de España. Naturalmente el gobierno dijo que la educación y la sanidad eran las "líneas rojas" de su política, y no se tocaría un ápice su presupuesto, y la opinión del ministro del ramo, era solo eso, una opinión.
En menos de 24 horas, un teletipo firmado por el gobierno de España anunciaba un recorte de diez mil millones de euros en educación y sanidad. Ningún responsable convocó una rueda de prensa para explicar semejante barbaridad... simplemente, se limitaron a "obedecer".
  Es de imaginar que en esas 24 horas, hubo una lucha a muerte entre nuestro gobierno y los mercados financieros especulativos, que son los que tienen el poder real. Naturalmente la fratricida lucha la ganaron estos, y a partir de aquel momento nuestro gobierno ha sido su fiel sirviente... el papel de criados que ya no representan a nuestro país, sino que son títeres, lacayos de unos mercados financieros que cada vez quieren más y más poder.

  A partir de aquel momento las contrarreformas se han acelerado. Los convenios colectivos de las pequeñas y medianas empresas se han convertido en papel mojado, dejando desprotegidos a millones de trabajadores que sin un convenio del sector que los ampare, poco pueden reivindicar con su empresario. Supone poner fin a las relaciones laborales que durante los últimos treinta años habían transformado nuestra sociedad en un ejemplo de cohesión social y desarrollo económico. No en vano, hasta el año 2008, éramos la novena potencia mundial y nuestro índice de desarrollo humano estaba entre los primeros del mundo...




  Posteriormente llegó la fortísima subida de impuestos que ha empobrecido a la clase media y la desprotección a los más débiles, la reducción de las prestaciones sociales, subsidios de desempleo, castigo a los pobres, criminalización de la protesta, anulación de la crítica en los medios de comunicación "controlados" como nunca por un gobierno a las órdenes de mercados extranjeros... y toda una diatriba de inconexas declaraciones que han conseguido hundir nuestro país, elevar los intereses de nuestra deuda hasta niveles que ya no nos van a permitir financiarnos, ni naturalmente poder pagarla. Hemos de añadir a semejantes despropósitos, que la amnistía fiscal a los grandes defraudadores es un insulto para los ciudadanos que honradamente pagamos nuestros impuestos...

Todas estas medidas que no son reformas sino recortes y subidas de impuestos, están acabando con España.

Lo peor está por llegar: los mercados especulativos exigen más y más. No se conforman con lo mucho que están ganando, y sabedores de la debilidad de nuestro gobierno cuya misión es obedecer y callar, siguen con su lista de inasumibles exigencias que nos impiden crecer, estimular nuestra economía y generar confianza y puestos de trabajo.

   Como decía Nestor Krishner hace una década, cuando Argentina se vio sumida en el corralito,"déjennos crecer, porque nos están asfixiando. Y los muertos, no pagan las deudas".

Ya es demasiado tarde. Deberíamos haber orientado nuestra política económica hacia medidas Keynesianas hace por lo menos dos años, como las que se han llevado a cabo en EE.UU. con la administración de Obama, o como las puestas en práctica recientemente por las nuevas autoridades francesas. Pero ya es demasiado tarde para España. El BCE ha dejado claro que no pueden ser nuestros acreedores y que no nos van a comprar deuda, porque saben que no podremos devolverla, que las condiciones serían mortales para nuestro país, y que no nos quedaría más remedio que solicitar una "quita", una condonación... somos el país del mundo que menos confianza ofrece a los inversores, y eso lo dice el FMI, así que no nos queda otra salida más que esperar que algún país nos compre deuda a unos intereses no demasiado altos, o que provoquemos una ruptura con el euro...o algo aún peor...





  El gobierno de este país no representa a sus ciudadanos, sino que es el fiel lacayo de unos mercados financieros especulativos altamente desregularizados y sin normas de actuación, y que han conseguido imponer sus criterios y hacerse con TODO EL PODER. Lo lógico sería que nuestro gobierno dimitiera, porque no nos representa y lleva más de siete meses haciendo aquello que les obligan, y que no constaba en su programa.
   Consecuencia de sus contrarreformas, los mercados especulativos se han dotado de un gran poder económico y político, y nuestro estado acusa una debilidad insólita en su historia. Digamos que nuestro gobierno ha malvendido España por unas pocas monedas. Como sucedió en Argentina hace poco más de una década, cuando el corralito obligó a vender muchas empresas a precios muy por debajo del mercado porque estaban en la miseria...

  Estamos en una situación postdemocrática bajo la dictadura de los mercados, huérfanos de representantes y con un gobierno de lacayos que cuando hablan, más pareciera que representan el papel de payasos de circo.

 Solo que maldita la gracia que nos hacen. 

 

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